Ciudad de México.- Carlos Slim Helú fue claro mientras se realizaban las negociaciones para producir la vacuna contra la COVID-19 para América Latina. “Apúrense, ya cierren el acuerdo”, ordenó, de acuerdo con lo señalado por Arturo Elías Ayub, director de la Fundación Telmex-Telcel en entrevista realizada por El Financiero.
Ayub dijo que Slim demostró prisa por la posibilidad de salvar vidas y no veía la inversión en la vacuna como un riesgo económico.
Agregó que las negociaciones rápidas que hizo la Fundación Carlos Slim no son con fines de lucro pues corren el riesgo de perder todo el dinero invertido de un inicio. Si la vacuna de AztraZeneca y Oxford no pasa la fase 3, que es la última antes de que la FDA en Estados Unidos le dé el visto bueno para comenzar a producirse, la fundación podría perder una “cantidad importante” de dinero, reconoció.
“Vamos a empezar a producir antes de que se apruebe la vacuna. En caso de que no se apruebe, la Fundación perdería ese dinero; en caso de que se apruebe, con la venta de la vacuna se le regresaría a la Fundación sin intereses el dinero que se está poniendo ahorita”, señaló Elías Ayub al medio.
También adelantó que se producirán de 150 a 250 millones de dosis en el laboratorio argentino mAbxience de Grupo Insud, mientras que el envasado, terminado y exportación se realizará desde la planta de la mexicana Liomont, ubicado en Ocoyoacac, Estado de México, que cuenta con una capacidad de dos a 15 millones de dosis en su división de vacunas.
México estaría invirtiendo alrededor de 25 mil millones de pesos para la vacuna, informó el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador durante su conferencia matutina.
LA META ES SALVAR VIDAS
En entrevista con la agencia EFE, Elías Ayuba también dijo que salvar la mayor cantidad posible de vidas es el único interés del multimillonario mexicano Carlos Slim con la vacuna contra la COVID-19.
“Oye, pero cuesta tanto (cantidad de dinero) y él repetía: ‘hagan el trato, ciérrenlo y lo único que le importó en esta negociación era el tiempo, porque lo que quiere es salvar, lo antes posible, la mayor cantidad de vidas posibles, eso es lo único que le preocupa y lo que le ha interesado en este proceso”, añadió.
Precisamente, el trato con AstraZeneca en el que participó el equipo de Slim fue considerado como una “una negociación diferente”, dijo Elías Ayub, su yerno, acostumbrado a los grandes negocios en el sector de las telecomunicaciones.
“Aquí no puedes negociar con la vida de la gente, no puedes negociar con la salud, entonces lo que tratamos, más que cerrar un buen trato, que creo que fue un gran trato para las dos partes, fue hacerlo lo más rápido posible”, relató.
El empresario dijo que el objetivo era cerrar el trato lo antes posible para que “empezara la fabricación” de la vacuna de forma rápida y para “que se entregue” en el menor tiempo.
El miércoles, AstraZeneca firmó un acuerdo con la Fundación Carlos Slim para contribuir a la producción en Argentina y México y la distribución sin beneficio económico en América Latina, de la potencial vacuna contra la COVID-19, AZD1222, durante la pandemia.
Este acuerdo proveerá inicialmente 150 millones de dosis en la región, excluyendo a Brasil, que será cubierto por el acuerdo de AstraZeneca con el Gobierno brasileño anunciado en junio pasado.
Se esperan que los envíos comiencen en el primer semestre de 2021, en caso de que los ensayos clínicos resulten exitosos.