CDMX. La consulta que Morena realizó ayer en Baja California fue una absoluta tomada de pelo, completamente ilegal y una burla para los ciudadanos, que refleja la doble cara del partido gobernante, aseguró el Presidente de Acción Nacional, Marko Cortés Mendoza.
Dijo que fue un ejercicio absurdo e indebido, con el único propósito de “tantear” a los bajacalifornianos y “justificar” una reforma a la Constitución local para ampliar a 5 años el periodo de gobierno de Jaime Bonilla y, de esa forma, dejar el grave precedente y poder cumplir el apetito de poder, tanto de Morena como del Presidente López Obrador.
Cortés Mendoza dijo que los resultados de la mal llamada consulta no deberían tener ningún peso en la resolución final del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ni en la Suprema Corte de Justicia sobre la duración del periodo de Bonilla, porque, por si fuera poco, las preguntas estuvieron “amañadas” para inducir un resultado que Morena quería, dicho por el propio Consejero Presidente del INE, Lorenzo Córdova.
Asimismo, indicó, expertos en materia político electoral han coincidido en señalar que lo que busca el gobierno morenista es legitimar a toda costa esta burda práctica como mecanismo para después legalizar decisiones políticas como ampliaciones o reducciones de periodos de gobierno.
El propio consejero del INE, Ciro Murayama, escribió en su cuenta de Twitter que “la pseudo consulta que se lleva a cabo en Baja California, sin base constitucional ni legal para alargar el mandato del gobernador, nos recuerda que la democracia es una frágil construcción social que hay que cuidar y defender día tras día”.
Lamentablemente hay un solo paso de la revocación, a la confirmación o ampliación de mandato, con 4 votos de 11 ministros, Gobierno Morenista pretende avalarlas.
El dirigente nacional del PAN señaló que se trata, a todas luces, de una burla más a la inteligencia de los ciudadanos por parte de Morena, ya que todos quienes promovieron y participaron en la consulta fueron militantes de este partido y hasta hubo personas que votaron varias veces a cambio de los programas clientelares, que ofrecen los siervos de la nación.
Añadió que aunque el Presidente de la República repita que él no se mete en asuntos de los estados, lo cierto es que el sábado estuvo en Baja California “seguramente para impulsar la consulta morenista, consintiendo claramente la movilización y uso de recursos públicos que hacen los siervos de la nación, siendo todo “un experimento perverso para manipular la voluntad ciudadana”.