Ciudad de México.- Tras haberse identificado una nueva mutación del coronavirus con presencia en Europa y Estados Unidos, en México generó la duda de si esta podría llegar al territorio nacional por los estados fronterizos. Sin embargo, el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, aclaró que un cierre de fronteras no lograría contener al COVID-19.
En la conferencia diaria sobre la pandemia, el subsecretario mencionó que continuamente aparecerán variantes genéticas del virus SARS CoV-2, por lo que es “muy improbable que aparezca una mutación en el corto tiempo”, además de que existen pocas posibilidades de que la variante genere atributos diferentes a la hora de invadir a los seres humanos.
Comentó que aunque en el escenario hipotético de que una cepa del virus mutara con elementos de importancia, “la idea de que podemos detenerla cerrando fronteras, impidiendo vuelos no es procedente”.
En relación con esto aseguró que “la cepa que sea, va a llegar a México y a todos los países del mundo» y señaló el control epidémico no funciona de esa manera. Esta práctica se habría cimentado luego de una larga tradición que es más política que científica.
En cuanto a las mutaciones del virus, explicó que:
La mayoría de las mutaciones, la enorme mayoría son mutaciones que no confieren estas ventajas adaptativas, tampoco, necesariamente confieren una desventaja.
Entre los elementos que podrían cambiar estaría la facilidad de transmisión, la adaptación al tejido respiratorio, la virulencia o la expansión al sistema inmune.
Aseguró que la gran mayoría son mutaciones neutras, mientras que las más resultan ser positivas para el virus, aunque también existen las que resultan negativas para la especie invadida.
No es que no pueda ocurrir, pero la probabilidad de que eso ocurra en un corto tiempo (es muy poca), ya que ocurrió una primera mutación que llevó al salto entre especies y pasó a los seres humanos.
Aseguró que esa primera mutación le habría conferido al virus SARS-CoV-2 la capacidad de instalarse en el organismo de los seres humanos. Pidió que se tuviera cuidado con las noticias que hablen acerca de una “nueva cepa” del virus, pues las mutaciones podrían ser de poco riesgo.
Además, recordó que en caso de que una de ellas fuera de importancia, la propia Organización Mundial de la Salud (OMS) daría a conocer la información.
En conferencia de prensa vespertina, José Luis Alomía Zegarra, director nacional de Epidemiología, dio a conocer que hay 978,531 casos acumulados y 95,842 muertes causadas por la enfermedad en el país.
No obstante, en las últimas 24 horas se sumaron 5,746 personas a la cifra de contagios y 617 a la de defunciones. Asimismo, se comunicó que la proporción de las personas que han dado positivo a la prueba de COVID-19 se ubicó en 39% en la semana 44.
Adicionalmente, se contabilizaron 61,303 casos sospechosos con posibilidad de resultado; 1,191,522 negativos, y un total de 2,537,046 personas estudiadas desde el primer caso registrado en el país. También se reportaron 189,087 casos sospechosos sin muestra y 116,603 sospechosos sin posibilidad de resultado.
Las defunciones ocurridas durante la semana epidemiológica 44 fueron 2,827. Mientras tanto, se reportaron 497 defunciones sospechosas con posibilidad de resultado, 10,795 defunciones sospechosas sin muestra, y 4,379 defunciones sospechosas sin posibilidad de resultado.