Oaxaca. La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) condenó la irrupción violenta de un grupo armado, en la vivienda de la defensora de los derechos humanos Rogelia González Luis, ocurrido este jueves 13 de enero en Juchitán de Zaragoza, y exigió a las autoridades garantizar su integridad física, así como la de las personas que se encuentran en su entorno.
Luego de tener conocimiento de los hechos, el ombudsperson Bernardo Rodríguez Alamilla estableció comunicación con la defensora, al tiempo que personal de la institución le brindó acompañamiento ante las autoridades.
Por el hecho, la DDHPO inició el expediente DDHPO/CA0018/(21)/OAX/2022 través del cual dictó medidas cautelares y pidió a las autoridades de seguridad pública estatal y a las de Juchitán de Zaragoza, llevar a cabo acciones inmediatas tendientes a garantizar el bienestar de Rogelia González, su familia y las personas que se encuentran en el Refugio Regional de Mujeres Indígenas “China Yodo”, del cual es fundadora.
Asimismo, solicitó a la Fiscalía General de Justicia del Estado que realice las investigaciones correspondientes, tomando en cuenta la actividad de defensa de derechos humanos como una de las líneas de las indagatorias.
Cabe destacar que, de enero de 2018 a diciembre de 2021, la Defensoría inició 61 expedientes por agresiones contra personas defensoras de derechos humanos, siendo las más recurrentes: amenazas, intimidaciones, detenciones arbitrarias y tratos crueles e inhumanos.
Asimismo, señaló que las personas activistas y defensoras de derechos humanos son esenciales en la construcción de una sociedad más justa e igualitaria, pues dan voz a grupos históricamente invisibilizados, además de poner en la agenda pública las desigualdades que afectan a la sociedad en su conjunto y con ello, dirigir o redirigir las políticas públicas para una atención integral de distintas problemáticas.
Por ello, advirtió la DDHPO, las agresiones en su contra, afectan a toda la población y dejan en la indefensión a los sectores y/o comunidades a las cuales acompañan, y en el caso de la profesora Rogelia, a las mujeres indígenas y sus hijas e hijos, a quienes brinda un espacio de resguardo contra la violencia de género.
El organismo autónomo sostuvo que las personas que se dedican a defender los derechos de las mujeres se enfrentan a una situación de riesgo agravado producto de los altos índices de criminalidad e impunidad en distintas regiones de Oaxaca, por lo que llamó a atender el contexto global de este hecho.