San Raymundo Jalpan. El Presidente de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) Horacio Sosa Villavicencio, presentó al Congreso Local, la proposición con punto de acuerdo, por la que se busca exhortar a las autoridades competentes a garantizar el retorno seguro, digno y voluntario del defensor de derechos humanos Raúl Gatica Bautista y las demás personas exiliadas de Oaxaca por motivos políticos.
Lo anterior a fin de garantizar el ejercicio libre y seguro de los y las luchadoras sociales en la entidad oaxaqueña.
La proposición legislativa demanda en específico, al titular de la Fiscalía General del Estado de Oaxaca (FGO) Rubén Vasconcelos Méndez, atraer las investigaciones sobre el activista y personas antes mencionadas, garantizando en todo momento el acceso a la justicia y la verdad.
El representante popular indicó que en 2004, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) otorgó medidas cautelares a favor de Raúl Gatica, mismas que fueron negadas por el exgobernador Ulises Ruiz Ortiz.
Informó que actualmente, Raúl Gatica continúa en el exilio dado que aún no se han adoptado las medidas necesarias para garantizar su vida y su integridad personal, y tampoco se garantiza el ejercicio de su actividad como defensor de derechos humanos en el estado de Oaxaca.
“Más allá de los méritos personales de Raúl Gatica, es obligación del Estado establecer las garantías para el trabajo de las y los defensores de derechos humanos”, expresó el diputado Horacio Sosa.
Reconoce la intensa lucha de Raùl Gatica, por defender las prácticas tradicionales en la toma de decisiones comunitarias y las acciones para preservar los diversos ecosistemas de Oaxaca y evitar la siembra de plantas transgénicas.
Así como la fundación el 18 de noviembre de 1997, del Consejo Indígena Popular de Oaxaca «Ricardo Flores Magón» (CIPO-RFM) como una alianza de organizaciones sociales de Oaxaca.
Sosa Villavicencio, relata en la propuesta jurídica, las violaciones a sus derechos humanos de las que fue víctima el luchador social, entre ellas que: fue durante el gobierno de Diodoro Carrasco Altamirano, cuando de manera arbitraria se realizó la detención, de Raúl Gatica, en conjunto con 70 integrantes de CIPO-RFM, siendo únicamente él desaparecido y torturado en una cárcel clandestina, dando así inicio a una serie de agravios en su contra.
Detalló en el documento, que el 15 de abril del año 2000, ya en el gobierno de José Murat Casab, hubo un intento de asesinato contra Raúl Gatica y su hijo Inti, en su domicilio, hiriéndolos con golpes resultando lesionados, y presentando 12 y 7 puntos en la cabeza, respectivamente.
Añade el registro de un ataque más hacia el activista, el 14 de septiembre de 2004, en el gobierno de José Murat, elementos de la Agencia Federal de Investigaciones, uniformada y vestidos de civil desalojaron un plantón de protesta frente al templo de Santo Domingo.