Según un informe de South China Morning Post, las autoridades chinas han identificado al menos a 266 personas que contrajeron el virus el año pasado y que estaban bajo vigilancia médica. Entre ellos, el primer caso de contagio entre humanos, el paciente uno. Fue el 17 de noviembre.
Los datos obtenidos por el Post cuentan que se trata de un hombre de 55 años de la provincia de Hubei, la primera persona en contraer Covid-19 de otro humano y por tanto el paciente uno. Un mes después del 17 de noviembre, se informaron de uno a cinco casos nuevos cada día, según el informe, y para el 20 de diciembre había 60 casos confirmados.
Las declaraciones oficiales del gobierno chino a la Organización Mundial de la Salud habían informado que el primer caso confirmado había sido diagnosticado el 8 de diciembre. Los médicos que intentaron dar la alarma a sus colegas sobre una nueva enfermedad a finales de diciembre fueron reprendidos. De hecho, las autoridades no admitieron públicamente que hubo transmisión de persona a persona hasta el 21 de enero.
Ahora la pregunta parece más clara que nunca: ¿se podrá localizar al paciente cero del coronavirus? El primer contagio de animal a humano sería de gran importancia para la ciencia, aunque como ha explicado Jonathan Mayer, profesor emérito del departamento de epidemiología de la Universidad de Washington, “es muy improbable que alguna vez se identifique al paciente cero”.