CDMX. Gobierno mexicano anunció este viernes que comenzará la aplicación de la vacuna contra la COVID-19 en niños, niñas y adolescentes de entre 12 y 17 años que sufran de enfermedades crónicas y otras comorbilidades, en una fase donde se cubrirán hasta 1.5 millones de menores de edad.
El funcionario sanitario recordó que solamente se podrá usar la vacuna desarrollada por Pfizer-BioTech, ya que es la única hasta ahora que la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) ha aprobado para el sector de entre 12 y 17 años en México.
En esta primera fase de vacunación de menores de edad con enfermedades crónicas y otras comorbilidades se perfila vacunar a entre 750 mil y 1.5 millones de niños, niñas y adolescentes, remarcó.
En la primera semana de octubre, además, se prepararán las unidades de vacunación, ya que se utilizarán unidades hospitalarias. Estos sitios de vacunación, a diferencia de los usados para inmunizar adultos, serán sitios permanentes de vacunación.
“Será un proceso distinto al de adultos, donde se procede en territorios y municipios. En este caso, como la enorme mayoría [de menores de edad] son identificados necesariamente, vamos a usar la estructura del Sistema Nacional de Salud, en las unidades médicas donde se tratan estas personas, principalmente hospitales de segundo nivel. Serán sitios permanentes de vacunación”, añadió López-Gatell.
Unos días antes, el martes 28 de septiembre, se publicarán los lineamientos técnicos y la lista completa de comorbilidades que se considerarán para la vacunación de las niñas, niños y adolescentes de entre 12 y 17 años.
Entre las comorbilidades mencionadas este viernes por López-Gatell están aquellas relacionadas con inmunosupresión, como son el cáncer, los trasplantes, el VIH, entre otras. Asimismo, se considerarán enfermedades pulmonares crónicas graves.
También están consideradas las enfermedades crónicas del riñón, hígado o sistema digestivo; enfermedades neurológicas crónicas; y enfermedades cardiovasculares.
La lista parcial mencionada por López-Gatell incluyó además a aquellos menores que sufran diabetes y otras enfermedades endocrinas (incluye obesidad grado 2 o mayor).
El Subsecretario de Salud había sido fuertemente cuestionado por haber dicho a principios de agosto que, por cada dosis de la vacuna contra la COVID-19 que se desviaba hacia un niño o niña a través de amparos, como ha sucedido en distintas entidades del país, incluida la Ciudad de México, en las últimas semanas, “se le quita la oportunidad de inmunizarse a una persona que tiene un riesgo mayor”.
Este viernes, López-Gatell aseguró que “encontramos que existe congruencia en otros países con lo que presentamos en México”. “Las agencias mundiales, como la Organización Mundial de la Salud y algunas regionales como los CDC de Europa y grupos técnicos asesores, como la Comisión Conjunta de Inmunización del Reino Unido de la Gran Bretaña, siguen manteniendo la postura de México”, dijo.
¿Cuál es esa postura? “Concretar vacunaciones en adultos de 18 años y más, así como considerar ya a quienes tienen enfermedades crónicas aun como menores de edad, porque su riesgo ya es equivalente en términos de magnitud a las que tienen las personas adultas”, argumentó el funcionario.