Ciudad de México.- Este lunes se reveló -mediante una investigación- que el gobierno de Enrique Peña Nieto (2012-2018) espió a periodistas, activistas, a los padres de los 43 normalistas desaparecidos de Ayotzinapa, e incluso al entonces líder opositor y actual presidente de México, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), a través del programa Pegasus.
Fue el consorcio coordinado por la empresa francesa, Forbidden Stories, quien dio a conocer que gobiernos de varios países espiaron mediante Pegasus, de la firma israelí NSO Group a 50 mil números telefónicos de activistas, políticos y periodistas.
Sin embargo, López Obrador no fue el único investigado, ya que también sus familiares y asesores más cercanos, como su consejero jurídico, Alfonso Romo, Julio Scherer o Jesús Ramírez Cuevas, también fueron espiados.
Además, interceptaron el teléfono de su cardiólogo, Patricio Heriberto Ortíz, quien le salvó la vida tras un infarto en 2013. De igual manera, se espió a la actual alcaldesa capitalina, Claudia Sheinbaum, y a por lo menos 45 gobernadores y exgobernadores, así como al expresidente Felipe Calderón (2006-2012).
“Fueron víctimas padres y madres de los 43 estudiantes de Ayotzinapa desaparecidos y también el actual presidente de la República y varias personas de su entorno, su esposa, hijos e incluso su cardiólogo”, dijo a Efe Edith Olivares, directora interina de Amnistía Internacional México, organización que dio apoyo técnico a la investigación.
Cabe recordar que en 2017, The New York Times reveló que el Gobierno mexicano había espiado con Pegasus a la periodista Carmen Aristegui y al defensor de derechos humanos Mario Patrón, entre otros.
“La investigación evidencia de que hay una intención en quiénes están siendo espiados digitalmente, no fue un asunto al azar”, señaló la directora de Amnistía en México, quien pidió aprovechar este escándalo para aprobar leyes que “limiten la vigilancia digital”.
En ese momento, Peña Nieto negó “categóricamente” el espionaje a periodistas y activistas, y ordenó a la Fiscalía investigar el asunto.
“Nos parece una buena oportunidad para que el actual presidente, que fue víctima de ese espionaje, haga público si hubo esa investigación y si no la hubo que la haga”, declaró Olivares.
Países como Arabia Saudí, Marruecos, Hungría, la India y Azerbaiyán usaron esa tecnología, pero México encabeza la lista de números espiados con cerca de 15 mil.