Ciudad de México.- Ana Lucía Salazar, una de la víctimas de abusos sexuales por parte del religioso Fernando Martínez, recibió una carta directamente del Vaticano, en donde se le informó que el Papa Francisco aceptó la petición de salida de su agresor, Fernando Martínez, del estado clerical. Sin embargo, el religioso seguirá perteneciendo a la Congregación Legionarios de Cristo.
En respuesta, la hoy conductora de televisión, a través de su cuenta de Twitter, acusó al Papa Francisco de preferir “el bien de la iglesia en lugar del bien de las víctimas de violencia sexual clerical”.
Aunado a ello, Salazar añadió: “me hubieran mandado una cuerda para colgarme en mi casa”.
“Fernando Martínez Suárez fue notificado de que el Santo Padre ha aceptado su petición de salida del estado clerical por el bien de la iglesia”, se detalló en el documento.
La carta firmada por el padre Andreas Schöggl, secretario general de la Congregación, justificó que la petición de salida del acusado fue realizada para “aliviar” el sufrimiento de sus víctimas.
“Él (Fernando Martínez) hizo esta solicitud para buscar aliviar de algún modo el sufrimiento causado a usted y a las demás víctimas”, precisó el pronunciamiento.
“El Santo Padre ha decidido que Fernando Martínez sigue perteneciendo a nuestra Congregación. Así aseguraremos que lleve una vida que corresponda con su condición de religioso aparatado del estado clerical”, continuó.
Finalmente, las autoridades católicas señalaron que, al igual que Ana Lucía, las demás víctimas de violación por parte de Martínez serían notificadas de dichas medidas tomadas por los Legionarios de Cristo.
“Vamos a informar de estas disposiciones a las demás víctimas que ya están en contacto con nosotros”, afirmó la carta.
A partir de que la noticia fue anunciada por la Congregación para la Doctrina de la Fe, Ana Lucía ironizó en su red social sobre el castigo impuesto a Martínez a casi tres décadas después de que los abusos se denunciaran ante sus superiores en los años 90.
“El Papa decidió que el señor siguiera en las filas de la Iglesia después de violar niños”, escribió Salazar el lunes. “¡Ahí está la tolerancia cero!”.
El pasado 2 de mayo, Lucía se sumó al #MeToo tras emitir una denuncia pública en la que afirmó que fue víctima de abuso sexual por parte del Padre Fernando Martínez. Los abusos se dieron cuando la víctima tenía 8 años, mientras estaba inscrita en el Instituto Cumbres. Además, en su denuncia, Salazar aseguró que las autoridades escolares decidieron “callar”, al igual que los padres de otras víctimas menores de edad.
“Estoy buscando información sobre el Padre Fernando Martínez, yo soy una víctima de ese señor, el me abusó cuando yo tenía 8 años, estoy en búsqueda y reuniendo información”, indicó en su cuenta de Twitter.
Por Sin Embargo.