A pesar de que en varias zonas del mundo se vive un incremento de contagios por COVID-19, un grupo de científicos en Estados Unidos descubrieron el S2H97, un «superanticuerpo» que podría ser la clave para la fabricación de vacunas que puedan combatir las variantes del SARS-CoV-2.
De acuerdo con un artículo publicado por la revista Nature, el S2H97 podría no sólo ayudar con vacunas y tratamientos para combatir el COVID-19, sino también contra todos los coronavirus estrechamente relacionados.
El estudio a cargo de Tyler Starr, bioquímico del Centro de Investigación del Cáncer Fred Hutchinson en Washington, propone una solución ante las variantes del COVID-19, las cuales han adquirido mutaciones que permiten que el virus escape del alcance de los anticuerpos.
El estudio consistió en intervenir 12 anticuerpos que se aislaron de personas que estuvieron infectadas del SARS-CoV-2 o su pariente cercano, el SARS-CoV.
«Superanticuerpo» protegió a hámsteres de todas las variantes del COVID-19
Estos anticuerpos se adhieren a un fragmento de proteína viral que se une a los receptores de las células humanas.
Aunque en muchas terapias de anticuerpos para la infección por SARS-CoV-2 capturan el mismo fragmento de proteína, llamado dominio de unión al receptor, el superanticuerpo S2H97 se destacó por su capacidad de adherirse a los dominios de unión de todos los coronavirus que probaron los investigadores.
La función del S2H97 consiste en adherirse a la proteína S, la cual utiliza el COVID-19 para infectar a las células humanas. De esta forma, el superanticuerpo bloquea la función que le permite al virus abrir las células receptoras y alojarse en un cuerpo.
El estudio aún se encuentra en una etapa temprana y los resultados se obtuvieron con hámsters, quienes resultaron protegidos una vez que se adhirió el S2H97 a la proteína S, el cual los protegió ante cualquier mutación del COVID-19.