Al prohibir expresamente en la Constitución que el presidente de la república disponga de una partida secreta, hemos barrido un escalón más en la escalera de la corrupción que el neoliberalismo construyó para saquear a la nación, afirmó el senador Salomón Jara Cruz.
Al votar a favor de la reforma al artículo 74 de la Constitución, el elgislador oaxaqueño expresó que, durante los gobiernos priistas y panistas, quienes ocuparon la presidencia de la república dispusieron de cuantiosos recursos sin rendir cuentas a nadie y con la impunidad que les brindaban sus cómplices en el Congreso de la Unión.
Mencionó que debido a al legislación no se podrán conocer los montos exactos de las partidas secretas que dispusieron para su beneficio personal Miguel de la Madrid, Carlos Salinas de Gortari, Ernesto Zedillo, Vicente Fox y Felipe Calderón.
Indicó que con el cambio de régimen, hoy se sabe que el último año de la administración de Enrique Peña Nieto el gasto de la Presidencia de la República superó los tres mil 600 millones de pesos.
“El licenciado Andrés Manuel López Obrador terminó con la robadera que significó la partida secreta, y el año pasado el presidente de los mexicanos no gastó más de 600 millones de pesos, una diferencia tan grande como la que hay entre honestidad y corrupción”, expresó Jara Cruz.
A lo largo de la historia de México, señaló, las partidas secretas escaparon de la fiscalización del Congreso y del escrutinio de las y los mexicanos, “eran recursos que el presidente de la república podía usar para comprar chicles, vacacionar con su familia, o para sobornar a legisladores y jueces, en fin, para transar”, añadió.
“La Cuarta Transformación impulsa nuevas concepciones de lo que significa el servicio público y el ejercicio honesto y transparente del dinero del pueblo, el cual deberá usarse siempre en beneficio del pueblo”, concluyó el senador Salomón Jara Cruz.